martes, mayo 27, 2014




Quería, amaba.
Aquello ni era ni estaba,
o sí?
Si quería, si amaba
pero...
Ay los peros y los después
que ni querían antes, ni amaban antes,
ni eran ni estaban.
Por qué ahora?
Quiero, amo.
Me quiere, no me quiere,
así deshojo margaritas,
no les pregunto si me aman.
Cómo van amar si deshojo su belleza?

martes, mayo 13, 2014


Y la ciudad no es otra cosa
que esa esquina,
donde cae la lluvia.
Donde apenas amarillea la luz,
y el vapor que resucita
o quizás está despertando,
para irse lejos.
Y la ciudad que protege, 
ciertas veces...
tantas otras desguarece
y nos deja,
siendo apenas humo, rastro,
pequeñas señales de paso.
Donde se estuvo,
se esperó y... 
se creyó ser y consistir.
El cruce de caminos,
la esquina.
Ese punto de desencuentro
como líneas en fuga...
que solo se han rozado
en la carrera hacia allá.
El allá lejos,
más allá
nunca más.
Y así la esquina,
la calle y la vereda.
La luz y la polilla
que danza locamente
hasta caer
mientras  todo corre,
el agua , el tiempo
la gente.